El Plan Municipal de Coros de Santa Cruz de Tenerife cuenta ya con una trayectoria de más de veinte años de antigüedad. Formados por alumnado de entre siete y doce años, se imparte en quince centros educativos de la capital, que acogen en su programa educativo esta actividad pedagógica, cuya base fundamental en la que se sustenta es la capacidad de expresividad a través de la música cantada, y no cantada. Esta es una actividad donde el alumnado recibe no sólo conocimientos musicales y de canto coral, de manera lúdica y divertida, sino que además va a aprender a trabajar en grupo, valorar al colectivo sin perder de vista al individuo y respetar a los demás en su labor y trabajo. La aportación que cada uno realiza al colectivo es necesaria y fundamental para la consecución del fin común, que es al fin y al cabo, la capacidad de poder transmitir con el lenguaje cantado y corporal todo una batería de sensaciones y sentimientos. Es por tanto fundamental en la -“la formación de un coro”- la disciplina y el autocontrol, ya que sin esto no se puede aprender, trabajar ni avanzar. Igualmente el alumnado aprenderá que el silencio hay que valorarlo como marco interpretativo de su trabajo y de su aprendizaje, sin olvidar que la realización de un objetivo programado incide directamente en la autoestima y en la valoración personal al haber logrado cumplir el reto establecido.